El súmmum de la aventura en los Andes comienza en Aguas Calientes, donde apareces colgado en tirolina y lanzándote por un valle a velocidades vertiginosas. Esta experiencia de todo el día está abierta a todos los amantes de la adrenalina que deseen liberar el Indiana Jones que llevan dentro.
El viaje comienza con el trayecto en tren, y temprano por la mañana en la densa selva, a medida que nos dirigimos a una estación de energía hidroeléctrica en las montañas. A partir de ahí, continuaremos hacia el camping de Cola de Mono, que será nuestra base durante el día.
Recibirás casco, guantes y arnés, así como una charla de seguridad. Los instructores te colocarán entonces en la tirolina. Con el corazón latiendo fuerte, respira hondo y, si te atreves, mira la caída de 250 metros (820 pies) por debajo antes de soltarte. Tu adrenalina empezará a bombear mientras te agarras fuerte al cable de hierro y empiezas el primero de los seis descensos que cruzan el valle con un total de unos 2,5 kilómetros.
Después de la emoción, caminaremos de vuelta al campamento para comer un bocado. Después del almuerzo, empezaremos una nueva aventura con una caminata hasta el pueblo de Santa Teresa. Podrás disfrutar de los aromas embriagadores del café, té y cacao, que crecen en las terrazas a lo largo del camino. Mantén tu cámara a mano porque con suerte, también podrás detectar algunas de las especies de aves tropicales nativas de esta zona de menor altitud, incluyendo tucanes, motmots y pericos. Una vez que hayamos terminado esta parte, nos trasladaremos a la estación de tren para regresar a Aguas Calientes.
Discover Andean cuisine and architecture with a contemporary approach, creating innovative fusion-style fare, and casual sophistication under a traditional Amazonian thatched-palm roof. Both an experience and a destination, Café Inkaterra features an intimate setting overlooking the Vilcanota River. It is the ideal place for travellers to unwind, away from the crowds, following a visit to the ancient Machu Picchu Citadel.
Sube al cielo y disfruta de unas majestuosas vistas que pocos seres humanos han tenido el privilegio de presenciar. A pesar de estar dentro del campo de visualización de Machu Picchu, la ciudad perdida de Llactapata lleva en la ruta turística solo una década, ya que fue descubierta en 2003 por arqueólogos mediante fotografía aérea infrarroja. Esta excursión de medio día es lo más cercano a un viaje hacia lo desconocido que posiblemente puedas conseguir. Desde Llactapata, se puede ver tanto Machu Picchu como Huayna Picchu, lo que significa que a partir de aquí, se tienen vistas que pocos llegan a ver de ambas montañas sagradas de los incas.
Cuando los arqueólogos exploraban Llactapata, descubrieron un templo solar y casas sobre una superficie de varios kilómetros cuadrados en la misma alineación con el amanecer del solsticio de junio que Machu Picchu.
Tu aventura comienza con un desayuno temprano para que te prepares para el desafío que tienes por delante. Un tren nos llevará a una central hidroeléctrica, desde donde nos trasladaremos en un vehículo privado durante unos 30 minutos hasta el punto de partida del viaje a Lucmabamba. Nuestro ascenso nos llevará hasta el mirador de Llactapata, que se encuentra a más de 2000 metros sobre el nivel del mar. Disfruta de las vistas impresionantes del valle de Urubamba y las cumbres andinas, que albergan las otras ciudades perdidas.
Tómate un respiro para almorzar y disfrutar de este momento tan especial antes de continuar el viaje, bajando por el valle de Aobamba hacia la estación de tren. Puedes saltar a bordo y regresar a Aguas Calientes o hacer una excursión de dos horas.
Duración: Cinco/seis horas.
Hora de inicio/apertura: 18:00 h.