"Nadie está allí para recibir a los inquilinos, no te avisan de que dejan la llave en el portal del edificio, al entrar en el edificio no hay recepción y está lleno de bolsas enormes llenas de lencería para lavar.
Al final tuvimos que acercarnos al hotel de al lado para que la dueña nos ayudara a encontrar la llave, menos mal que la señora es encantadora y nos ayudó en todo momento, ya que llamanos al teléfono de contacto y nadie nos respondió; lo mismo ocurrió cuando avisamos (como indican las instrucciones de uso del apartamento) de que dejábamos el aparthotel, aún estoy esperando que nos responda las llamadas el dueño... "
Anónimo - 09/05/2018