Este hotel está ubicado en un gran edificio que ofrece pintorescas vistas panorámicas tanto de Habana y de la Costa Caribeña. El establecimiento ofrece a los huéspedes fácil acceso a la playa que está a tan solo pocos pasos del vestíbulo, mientras que paseando por la zona los viajeros podrán encontrar numerosas restaurantes que ofrezcan típicos platos locales y pequeñas tiendas donde encontrar productos artesanales. Para todos los que quieran conocer más factos de la Guerra Fría, podrán visitar el Museo del Ministerio del Interior que está a un corto paseo. Un poco más al oeste del establecimiento y siguiendo la Quinta Avenida los viajeros encontrarán varios restaurantes y hoteles. La propiedad ofrece una piscina, restaurante que sirve cocina internacional, un bar deportivo que ofrece mesas de billar y programas de cabaret.
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