…Y para allá que nos fuimos, a pasar la noche con la Diva del Pop para comprobar que a sus 50 añitos está más fresca que una rosa.
Para mi gusto, demasiado «playback» ya que si vas a ver a un artista en directo, yo personalmente, valoro más su voz y repertorio que su puesta en escena. Los bailes y coreografías a penas se aprecian si te encuentras a una determinada distancia, cosa que se suple con las enormes pantallas que acompañan al escenario, pero como bien me decía una amiga «no tiene gracia venir a escuchar a Madonna y nos tengamos que conformar con coros y playback e intentar imaginar las coreografías por las pantallas. Eso es como verla en la tele».
Y así es amigos, a mí no me defraudó completamente, ya que me fuí del concierto con un muy buen sabor de boca, pero tengo que reconocer que me esperaba «otra cosa».
Aquí os dejo una pequeña muestra de la canción que más hizo mella entre el público: una versión de La Isla Bonita, una muy buena puesta en escena y un ritmo pegadizo que hizo que moviéramos el esqueleto a tope las 50.000 personas que pudimos ir a verla.
La imagen no es de gran calidad ya que inmortalizamos el momento con una cámara de fotos, y a pesar de encontrarnos en Zona VIP estábamos bastante lejos del escenario. Pero bueno, creo que el sonido es bastante bueno. ¡Que disfrutéis!