El Algarve se promociona como un destino de "encanto" para disfrutar de una Nochevieja "especial", teniendo en cuenta sus "envidiables" temperaturas de invierno, porque sabe "cómo sacar lo mejor de sus fiestas y hacer sentir al visitante parte de ellas", y por su "buen gusto en la mesa".
Así, el Sur de Portugal pretende, a través de los cinco sentidos, acompañar a los visitantes en el inicio de 2009.
De esta forma, los fuegos artificiales serán una de las "señas de identidad" del último día del año en Algarve, acompañando a cada una de las doce campanadas de media noche.
Además, la fiesta estará envuelta en el encanto de la música, que amenizará muchos de los espectáculos callejeros, así como hoteles y complejos. Tras los festejos, en el día de Año Nuevo las calles se llenarán de "janeiras", canciones de Navidad que festejarán el 2009.
En cuanto a la gastronomía, a cada campanada le corresponde una uva pasa y un deseo. Asimismo, es típico en las fiestas navideñas comer las ‘filhoses’ , mientras que los "más golosos" podrán degustar ‘morgado ‘, ‘Don Rodrigos ‘ o pasteles de higo.
"El tacto de la arena, la caricia de la luz y el sol en la piel", se sumarán a los "olores evocadores y renovadores de energía vital", ya sea dando paseos al aire libre en jeep por la sierra, recorriendo en barco la desembocadura del Guadiana o llenándose con los aromas de las mejores terapias del wellness.
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Fuente: EUROPA PRESS